Saber cuándo es el mejor momento para solicitar un financiamiento tiene que ver, entre otros factores, con los requisitos que debes cumplir para saber si eres sujeto a crédito hipotecario. Por eso, antes de dar el gran paso, debes conocer a detalle cuáles son y en qué consisten.
Ser mayor de edad
Uno de los primeros requisitos que establecen los bancos es el rango de edad. Para ser acreedor a una hipoteca bancaria, debes tener mínimo 20 años y máximo 64 años 11 meses. Por lo general, si el solicitante es una persona joven, los bancos ofrecen condiciones más favorables.
Este aspecto también es tomado en cuenta por la entidad bancaria para definir el plazo dentro del cual deberás liquidar el préstamo.
Antigüedad laboral mínima de un año
Si estás trabajando actualmente, lo ideal es que tengas mínimo un año laborando en esa empresa de manera ininterrumpida; si cambiaste de trabajo recientemente, existen algunos bancos que calculan tu antigüedad laboral sumando el tiempo que estuviste en tu empleo antiguo con el actual, sin embargo, para que este periodo sea válido, debes tener entre 3 y 6 meses en tu trabajo actual.
Ahora bien, esta condicionante es exclusivamente para las personas asalariadas; si trabajas de manera independiente, deberás comprobar que cumples con mínimo 2 años en tu ocupación actual.
Ambos (edad actual y plazo), no pueden superar la edad máxima que determine el banco.
Tener ingresos comprobables
Aunque no todas las entidades financieras tienen establecido un mínimo de ingresos para autorizar una hipoteca bancaria, es necesario que compruebes tus ingresos económicos para que el banco tenga certeza de que cuentas con la capacidad para solventar tus pagos mensuales.
Los ingresos requeridos dependen del tipo de financiamiento que solicites y el monto a otorgarte dependerá de éstos, entre otros factores, para no perjudicar tu estabilidad económica.
Tener buen historial crediticio
Cuando te acercas a una entidad bancaria para solicitar una hipoteca, ésta consulta el Buró de Crédito para saber si eres un cliente confiable. El Buró de Crédito es una institución que cuenta con expedientes crediticios de Personas Físicas, Empresas y Personas Físicas con Actividad Empresarial, es por eso que sirve como referencia para el otorgamiento de créditos.
Si estás al corriente con el pago de otros proveedores (tarjetas de crédito, servicios de telefonía, tiendas departamentales, etc), tendrás una calificación positiva en el Buró de Crédito y, por lo tanto, serás un buen candidato para obtener tu crédito.
Lo importante es comprobar que puedes pagar tu crédito sin sobreendeudarte.
¿Qué se toma en cuenta para evaluar tu comportamiento crediticio?
- Historial de pago. Paga tus deudas en tiempo y forma, no abuses de los “pagos mínimos”, pues para el banco significa que tu capacidad de pago es limitada y tienes dificultades para solventar tus deudas. Cuando puedas, paga un poco más del mínimo.
- Antigüedad y uso. Mientras más tiempo tengas utilizando créditos y de manera constante, mejor será tu calificación en el Buró de Crédito.
- Varios créditos en poco tiempo. Solicitar muchos préstamos en un periodo corto de tiempo, se refleja en el número de veces que se ha consultado tu comportamiento crediticio y puede ser indicio de que necesitas dinero, demasiadas consultas en un periodo corto de tiempo, es motivo de rechazo.
- Solventar distintos créditos. Si bien no es recomendable endeudarse, sí se toma en cuenta cómo te organizas cuando tienes varios financiamientos para no atrasarte en los pagos.
- No abusar de tu límite. Independientemente de que tengas la capacidad de pagar a tiempo, si te acercas al límite de tu línea de crédito, te calificarán como un cliente que puede sobreendeudarse en cualquier momento.
Cumplir con estos requisitos te brinda la posibilidad de estar un paso más cerca de obtener una hipoteca bancaria. Si no cumples con todos, no te preocupes, estás a tiempo de prepararte para solicitarlo en un futuro sin ningún inconveniente.
Cuida tu estabilidad laboral para tener manera de comprobar ingresos y mantente al corriente con el pago de tus deudas.
Ahora que ya conoces los requisitos, verás que muy pronto estarás tramitando tu crédito hipotecario.